Deja caer tu cuerpo sobre el mío y déjalo dormido en el leve letargo que dure la noche,
usa mi pecho como si de una almohada se tratase si con ello estas mas cómoda, escuchando el latir de mi corazón convirtiéndose en el ritmo que ira marcando el dormir de tus sentidos, mientras, yo, me entretendré acariciando y dibujando formas en tu espalda que irán encadenadas de alguna reacción tuya. En ese momento parare y con mis labios recorreré todo lugar al que puedan acceder procurando no despertarte.
Sin darme cuenta termino despertándote por el cosquilleo de mis besos, sin darme cuenta te me quedas mirando mientras sigo sin saber de tu atenta mirada, sigo hasta encontrarme con tus ojos y susurrarte...
Buenos días cielo....
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